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Observa: el fármaco es el remedio para la enfermedad, para abatir la enfermedad, el grito es el efecto del susto; así el Profeta Moderno es el efecto de la arraigada injusticia.
Sin las injusticias, el Profetismo que os trasmito quedaría solo en el Poeta, el Sacerdote -
"el hombre divino que crea belleza, que danza en su inefable belleza y no dejaría sitio para el hombre divino que cura los residuos heridos de la belleza".
El profeta moderno es el llanto del Poeta que quiere convertirse en “risa” de Poeta, esta es la naturaleza del profeta moderno que no es el adivino, sino que es portavoz de la Gran Luz, de la conciencia cósmica divina.
Es: boca - palabra - verbo – ojo de la vida herida y moribunda por la nueva moderna guerra hecha de atentados al pueblo inerme y llena de abusos legalizados por el actual poder constitutivo, a la vida herida y moribunda.
Es supremacía de vida herida que nunca se doblegará frente a todos esos abusos y prevaricaciones, sino a través del profetismo de muchos “nadie” que obran, como forma de pensamiento, que nacen los “profetas”, para aliviar la opresión de muchos, para abolir la opresión de la mayoría, para dar conciencia a quien conciencia no puede tener, a quien le han quitado la conciencia y la libertad de pensar y actuar, ¡y ya no tiene conciencia!
A través de la palabra y el pensamiento positivo del profetismo moderno, matriz de real belleza y amor en la plenitud y en la libertad posible: él es creador de vida, todos vosotros seréis creadores de vida, transformareis la tierra, creareis una nueva y, esta, será a su vez transformada.
Él será padre-madre, e hijo en camino, pueblos en camino; él nace cuando la tierra está tan llena de dolor, pero también tan llena de esperanza, por descubrir.
Las clases dominantes del mundo afirman, con todos los medios “… lo que es, que existe como tutela de sus intereses, es justo que sea así…”, y esta es su justificación imperativa;
pero el discurso profético de una liberación global no puede, según las clases dominantes, tener sentido.
Discursos vanos, dicen los señores de la nueva guerra; guerra que se difunde por todo el planeta, van sembrando el absurdo, empeorando la vida, aumentando los dolores, que en los jóvenes se transforma en destrucción, no solo personal, con la muerte.
Los Señores de la nueva guerra quieren llevar confusión al confundido, por tanto, ellos son portadores de confusión.
Ellos, de este cielo, de esta tierra, sean radicalmente echados, perseguidos en cualquier lugar y allí donde haya un sospechoso.
Se necesitan “cielos nuevos” de nuevas Tierras, de “lobos que pastan con los corderos”.
Para terminar hoy, diré que la palabra del nuevo profetismo, es el efecto de la “herida de la Gran Luz” que los siervos del poder atribuyen a sus enemigos, lo que ellos querrían que fuesen sus enemigos.
Suenan potentes las palabras de Isaías.
Escuchémoslas, revelan la naturaleza del Profetismo: "El verdadero culto a Dios es romper el yugo puesto en el cuello de los oprimidos y liberar a los esclavos, compartir el pan con el pobre, albergar al infeliz sin casa y estar listo para el prójimo… Tu justicia te procederá y la fuerza del Eterno será tu retaguardia… Si luchas por la libertad, si erradicas todo tipo de explotación y evitas el pensamiento envidioso y el hablar del maligno y el gesto amenazante, arrogante. Si tu alma se dirige a las necesidades del débil y sanas el alma afligida, tu luz se elevará en las tinieblas… Y seréis llamados sanadores, redescubridores de sentimientos para hacer a los seres felices …” Biblia; Profeta Isaías: 58.
Amigos del "profetismo moderno" dejémonos atrapar por el cántico de Isaías, entremos en su realidad evocadora y reconozcamos la justicia, el potente deseo de libertad.
Sabemos de todas formas, que, en la realidad de la tierra, la injusticia prevalece y el justo la mayoría de las veces es: asesinado, perseguido, engañado.
Sucede todo lo contrario: el justo, el que se comporta con libertad y conciencia, es crucificado.
¿Cuántos justos deberán pasar todavía por la cruz, antes de resurgir en la gloria de su Luz?
Pero nosotros sabemos que la visión de Isaías responde a una necesidad de justicia, responde a una necesidad de verdad; las palabras de Isaías son verdaderas, anímicamente hablando.
Pero nosotros sabemos que el comportamiento justo, del que habla Isaías, recibirá su recompensa de manera inconmensurable.
Pero nosotros estamos llamados a hacer que las palabras de Isaías se realicen siempre, por doquier.
Estamos llamados a ser al mismo tiempo “lo Justo y lo Eterno”.
Pero ¿cómo podemos hacer que acontezca eso si somos tan impotentes y somos tan contradictorios y frágiles en nuestras insignificantes acciones?
Ante todo, todos debemos hacer nuestra la visión del Profeta, nuestra con toda nuestra mente y con todo nuestro cuerpo.
Esta visión obrará en nosotros transformándonos de simples súbditos en auténticos soberanos, en auténticos “Caballeros de la Tabla Redonda”
Sabemos que “Nadie puede ver el Reino de Dios si no nace de nuevo”. (Evangelio).
Y ese nacer de nuevo pasa a través de la inevitable muerte: “Pasión-Muerte, Renacimiento-Resurrección"; pero una cosa es llegar al Hades, a la Muerte (real o simbólica), preparados con una potente iniciación, protegidos por una potente visión, y otra cosa es llegar preparados por la mezquindad de una pequeña visión, por la mezquindad-propiedad de una realidad "Sirviente-Patrón".
Nosotros tenemos que actuar en consecuencia y soñar para que los Justos que, por amor a la Justicia, han sido humillados y masacrados, tengan su resurrección en cualquier lugar, en nosotros o fuera de nosotros, para que el "sacrificio de Abel", el justo, se transforme en la "resurrección de Abel".
El cántico de Isaías no se debe transformar en frustración, en mofa, en ilusión, en disociación, en un "jamás que no se hará", sino en "un jamás que se hace hoy".
Y es por eso que vamos en busca de la verdad... allá donde se encuentre.
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El proyecto del Profetismo Moderno nació el 24 de junio de 2016. Desde el principio nos impusimos afrontar las temáticas desde un punto de vista científico sin preconceptos. No nos ocupamos de investigaciones intelectuales o del porqué de las cosas, ni de lo que es la verdad (la verdad no se puede enseñar), sino de cómo la verdad puede ser alcanzada y realizada.
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El Profetismo Moderno es una actividad que se desarrolla en la red. A través de la red se hace un puente para crear formas de pensamiento positivas a fin de combatir toda forma de dominio y nuevas esclavitudes, causadas hoy día por pensamientos e ideologías equivocadas. Pensamos que todo hombre tiene el deber y la libertad de expresarse.
El profeta moderno nace como efecto de la arraigada injusticia, es el llanto del Poeta que quiere convertirse en “risa” de Poeta, esta es la naturaleza del profeta moderno que no es el adivino,
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Modern Prophets - Principles of Humanistic Logic
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